Washington, (EFE).- La tasa de desempleo en Estados Unidos se mantuvo, por tercer mes consecutivo, en el 3,7 % en enero con respecto a diciembre, según datos publicados este viernes por la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés).
La creación neta de nuevos puestos de trabajo subió de nuevo en el primer mes del año y se crearon 353.000, 20.000 más de los generados un mes antes, tras una fuerte revisión de la cifra de diciembre hasta los 333.000 puestos (117.000 más de los estimados cuando se publicaron los datos hace un mes).
La cifra es muy superior a los 255.000 puestos netos creados al mes en promedio en 2023 y está por encima de las previsiones que hacían los analistas.
Los aumentos de empleo se produjeron en los servicios profesionales y empresariales, la atención sanitaria, el comercio minorista y la asistencia social.
El empleo disminuyó, por el contrario, en la industria de la minería, las canteras y la extracción de petróleo y gas.
Enero cerró con 6,1 millones de personas desempleadas, un mes en el que los ingresos medios por hora aumentaron 19 centavos, o el 0,6 %, hasta los 34,55 dólares. En los últimos 12 meses, los ingresos medios por hora han aumentado un 4,5 %.
Los datos del desempleo se conocen dos días después de que la Reserva Federal (Fed) decidiera nuevamente mantener los tipos de interés sin cambios, en la horquilla del 5,25 % y el 5,5 %, su máximo nivel desde 2001.
El presidente de Fed, Jerome Powell, avanzó que si la economía evoluciona “en términos generales como se espera” será apropiado comenzar a reducir los tipos “en algún momento de este año”.
Para decidir cuándo llegará ese momento se estudiarán de cerca datos como el desempleo, que se mantiene sólido pese a las once subidas de tipos llevadas a cabo en los últimos dos años, y como la inflación.
Según las últimas cifras, los precios subieron tres décimas interanualmente en diciembre y el Índice de Precios al Consumo (IPC) cerró el año en el 3,4 %.
En cuanto al crecimiento, Estados Unidos cerró 2023 con un aumento del Producto Interior Bruto (PIB) del 3,1 %, gracias al mayor gasto de los consumidores pese a la inflación.
La cifra es mayor a la estimada por los economistas y superior al 2,1 % del crecimiento registrado en 2022, año en el que la primera economía del mundo sufrió una recesión técnica.