La educación es el factor más importante que determina el desarrollo de un individuo y de una sociedad.”
John F. Kennedy
INTRODUCCIÓN
Tras el embate de la pandemia global, el paisaje educativo experimentó un cambio sísmico, con el aprendizaje virtual convirtiéndose en la norma y los portones escolares cerrándose por tiempos inciertos. A medida que el mundo emerge lentamente de las sombras del COVID-19, un problema que sigue desafiando a educadores y responsables de políticas por igual es la tasa persistente de ausentismo escolar, un fenómeno que se ha negado a volver a los niveles previos a la pandemia. Este artículo explora la gravedad del problema, sus causas y los escenarios que impiden que se resuelva este asunto a nivel mundial, pero principalmente se enfoca en Estados Unidos y México.
EL AUSENTISMO NO RESUELTO
Diversas instituciones educativas revelan una tendencia preocupante: las tasas de asistencia escolar no se han recuperado completamente en el período pos-pandemia. Mientras que las interrupciones iniciales causadas por la pandemia eran comprensibles, la naturaleza perdurable de este ausentismo sugiere problemas subyacentes más profundos.
CAUSAS DEL AUSENTISMO
Persistentes preocupaciones de Salud: Para muchos estudiantes y padres, el miedo a enfermarse sigue siendo una preocupación tangible. El recuerdo de la pandemia y el potencial de futuros brotes continúan influyendo en las decisiones sobre asistir a la escuela en persona.
Salud Mental y Bienestar: El impacto psicológico de la pandemia no puede ser subestimado. Niveles aumentados de ansiedad, depresión y aislamiento social han hecho muy difícil para muchos estudiantes la transición de vuelta a las rutinas de ir a la escuela todos los días como era antes de la pandemia. Este temor se ve reforzado por la persistente condición de COVID prolongado en muchos casos.
Desconexión Académica: El aprendizaje remoto, aunque fue una respuesta necesaria a la pandemia, ha llevado a algunos estudiantes a sentirse desconectados de la comunidad académica. Esta desconexión ha dificultado su readaptación a los entornos de aprendizaje en persona.
Factores Socioeconómicos: La pandemia exacerbó las disparidades socioeconómicas existentes, afectando la capacidad de los estudiantes para asistir consistentemente a la escuela. Problemas como la falta de acceso al transporte, vivienda inestable y la necesidad de que los estudiantes mayores trabajen para apoyar a sus familias han contribuido al aumento del ausentismo. En los Estados Unidos un porcentaje pequeño, pero vergonzante son alumnos cuyos padres carecen de vivienda y viven en autos que estacionan en parques o lugares permitidos.
Problemas de la Escuela, los Administradores y los Profesores: En muchas escuelas ni siquiera se tienen datos confiables sobre el ausentismo, menos tienen un mecanismo para comunicarse con padres cuyos alumnos no asisten. Los administradores agobiados por tantos asuntos siguen protocolos que no funcionan sin convertir este asunto en un serio problema donde todos deben estar involucrados y cambiar las estrategias por otras que funcionen mejor.
CONSECUENCIAS DEL AUSENTISMO CONTINUADO
Los efectos secundarios del ausentismo sostenido son profundos, impactando no sólo al estudiante individual sino también al ecosistema educativo más amplio.
Rendimiento Académico: La asistencia regular es un predictor crítico del éxito académico. Los estudiantes que faltan frecuentemente a la escuela están en una desventaja significativa, a menudo luchando para mantenerse al día con sus compañeros académicamente.
Desarrollo de Habilidades Sociales: La escuela es un ámbito vital para el desarrollo de habilidades sociales. El ausentismo limita las oportunidades para que los estudiantes participen en interacciones sociales y construyan relaciones, cruciales para el desarrollo emocional y psicológico.
Impacto Económico a Largo Plazo: La educación es un motor clave de la movilidad económica. Las tasas de ausentismo más altas pueden llevar a tasas de graduación más bajas, limitando las oportunidades profesionales y perpetuando los ciclos de pobreza.
Mayores Recursos Educativos: El alto ausentismo puede perturbar el ambiente de aprendizaje, requiriendo que los maestros asignen recursos adicionales para ayudar a los estudiantes ausentes a ponerse al día, a menudo en detrimento de avanzar el currículo para todos los estudiantes.
Valores Cambiando en las Familias: Finalmente, con gran tristeza y mayor preocupación, “…nuestra relación con la escuela se volvió opcional”, comenta Katie Rosanbalm, psicóloga y profesora asociada de investigación en la Universidad de Duke. Dicho de otra manera, el valor de la escuela ha disminuido en importancia para muchas familias.
ESTRATEGIAS MULTIFACÉTICAS
Abordar las causas raíz del ausentismo postpandemia requiere un enfoque multifacético. Medidas de salud y seguridad, apoyo a la salud mental, estrategias de compromiso académico y abordar barreras socioeconómicas son componentes críticos de cualquier respuesta efectiva. Las escuelas, comunidades y responsables de políticas deben colaborar para crear entornos de apoyo que fomenten la asistencia regular y re-enganchar a los estudiantes con el proceso educativo. A medida que el mundo continúa navegando las secuelas de la pandemia, comprender y mitigar este drama es fundamental y el reto principal en las aulas del mundo.
ESTADOS UNIDOS Y MÉXICO
No llevó mucho tiempo en los Estados Unidos darse cuenta de este fenómeno preocupante. Los estudiantes dejaron de asistir a la escuela. Un reportaje reciente del NYT muestra que este hecho, aunque no sorprendente debido al cierre de escuelas en la primavera de 2020 al inicio de la pandemia y la reapertura parcial hasta el otoño de 2021, ha persistido más de lo esperado.
Datos de investigadores muestran que aproximadamente el 15% de los estudiantes estadounidenses estaban crónicamente ausentes de sus escuelas, lo que generalmente significa perder 18 días del año escolar por cualquier motivo. Para el año escolar 2021-22, ese número se disparó al 28% de los estudiantes. Y en el último año escolar, para el cual hay estimaciones nacionales disponibles, se mantuvo en el 26%. Los mismos datos revelan que el ausentismo ha aumentado en todos los grupos demográficos y en distritos tanto ricos como pobres, grandes y pequeños. Sorprendentemente, la duración del cierre de las escuelas durante la pandemia no predice útilmente el ausentismo, ya que los distritos que cerraron por más tiempo han experimentado aumentos similares a los que abrieron antes.
El panorama en México es más desalentador. Investigadores expertos concluyen que el sexenio a punto de terminar de la actual administración de López Obrador ha sido uno de los peores históricamente para las escuelas, los maestros y consecuentemente para los alumnos. La inclusión tardía de lo que se conoce como La Nueva Escuela Mexicana, ha traído un descalabro mayor en planes, programas y modelos. Los nuevos textos gratuitos tienen errores y muchos de ellos flagrantemente están contaminados con propaganda ideológica. Ha habido recortes tales para las escuelas que los datos de ausentismo son marginados y cuando existen son inconfiables y menos son atendidos con estrategias o protocolos.
CONCLUSIÓN
Los problemas educativos sin resolver son semi-silenciosos, no parecen urgentes, pero invariablemente cobran factura a las sociedades y las naciones. Es el caso de la ausencia de los alumnos de las escuelas en aumento desde la pandemia. Peor es que no parecen los distritos escolares urgidos de identificarlo, entenderlo y declararlo una prioridad.
Mientras que los índices educativos de Estados Unidos comparados con los de México siempre han sido desfavorables para estos últimos, siempre han tenido una distancia solventable sobre todo en preescolar, primaria y secundaria. Ahora parecen aumentar demasiado. Al mismo tiempo que los destinos de ambas naciones por muchas razones se encuentran irremisiblemente ligados por la geografía, la historia, la economía, el crimen y la migración.