Tokio, (EFE).- La japonesa Yui Ohasi se coronó como la “reina” de los estilos en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, luego de sumar este miércoles un nuevo oro en la final de los 200 metros, además del que consiguió el pasado domingo en los 400.
Un triunfo que la japonesa, que se impuso con un tiempo de 2:08.52, cimentó en su mayor fortaleza terminal, tras superar en los últimos metros a la estadounidense Alex Walsh, que tuvo que conformarse finalmente con la medalla de plata.
Metales por los que nunca tuvo opción de competir la hasta hoy campeona olímpica y plusmarquista universal, la húngara Katinka Hosszu, que concluyó en séptima posición, una final en la que la magiar ya transitaba a la conclusión de la primera posta a 1:30 segundos de la cabeza de la prueba.
Una carrera que estuvo dominada en sus primeros 100 metros por la china Yiting Yu, que lideró la prueba en las postas de mariposa y espalda.
Pero la joven nadadora china, de tan sólo 15 años, pagó su esfuerzo en la braza, donde se vio superada por cuatro rivales, entre ellas la estadounidense Alex Walsh y la japonesa Yui Ohashi, que se jugarían el triunfo en la posta de nado libre.
Cincuenta metros finales en los que Walsh entró con una ventaja de 7 centésimas, que fueron insuficientes para evitar el triunfo de Ohasi, que se impuso con un tiempo de 2:08.52, trece centésimas menos que Walsh, que se colgó la plata con una marca de 2:08.65 minutos.
Completó el podio también la estadounidense Kate Douglas, que pese a acceder a la final con el mejor registro de todas las participantes, no pudo pasar del tercer puesto, tras colgarse el bronce con un registro de 2:09.04 minutos.