Guadalajara, (Notimex).- Un cepillado completo después de cada comida, así como uso frecuente del hilo dental, disminuye el riesgo de extracción de piezas entre los 35 y los 50 años, rango de edad que es cuando existe mayor riesgo de perder piezas dentales.
El titular de Estomatología del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Jalisco, Jorge Alejandro Ávalos Rodríguez, destacó que es importante estar más atentos durante dicho periodo porque es una etapa en la que se pierde tejido a causa de la acumulación de sarro.
“Si a la falta de higiene se suman factores mórbidos como la diabetes o la hipertensión arterial, así como tabaquismo o alcoholismo, el paciente puede perder de una a cinco o más piezas en muy poco tiempo”, advirtió.
Explicó que cada vez que una persona come y no cepilla sus dientes, se acumula una capa de alimento con bacterias, mejor conocida como placa dento-bacteriana. Su textura durante las primeras horas, incluso días, es pastosa, pero conforme avanza el tiempo se endurece o calcifica, dando lugar al sarro.
“En cuestión de una semana esos restos de comida se vuelven arenosos y toman un color blanquecino. Al sarro lo encontramos sobre todo en los dientes inferiores, del lado de la lengua. Es casi seguro que cualquier persona, a partir de los 14 años, ya tenga este problema”, indicó.
Detalló que el sarro no sólo tiene implicaciones estéticas, sino que paulatinamente deteriora los tejidos blandos y alcanza los soportes óseos de cada diente.
Ávalos Rodríguez dijo que esta afección bucal es la principal causa de problemas gingivales o de encía y de extracción dental, porque cuando el paciente acude a recibir atención, generalmente ya tiene la pieza invadida de sarro hasta la raíz.
“Entre los 35 y los 50 años suelen agravarse patologías crónico degenerativas, así que el sarro, sumado a la práctica de malos hábitos como fumar o beber, tanto bebidas alcohólicas como bebidas con altos niveles de azúcares refinadas, provoca graves lesiones a la cavidad oral”, informó el especialista.
Recomendó a la población cepillarse adecuadamente la dentadura, lo mismo que visitar por lo menos una vez al año al dentista, quien puede realizar una limpieza de manera manual o con herramientas de láser.
“Muchas veces nuestras actividades diarias no nos permiten asear nuestra boca adecuadamente, pero es importante hacer un esfuerzo en este sentido para conservar sana esta parte tan importante de nuestro organismo”, reiteró.