• Homenaje póstumo al Dr. Cortina Saint André
Parece interminable el constante flujo de cifras relacionadas con el Covid 19 que, tal parece, su mortífero efecto estará presente durante los siguientes meses, pese al optimismo que se había despertado a finales de 2021 en el sentido de que era inminente el fin de la pandemia.
Las cifras han ido en ascenso y con ello el consecuente efecto en varios rubros de la economía y otras actividades, sin que quede excluida la política donde, los funcionarios gubernamentales, los encargados de la lucha por abatir los estragos del virus y los que no tienen esa asignación, resienten la incapacidad para dar por concluida la lucha contra la enfermedad que hace dos años era inimaginable.
Un caso que merece ser comentado para dar un ejemplo de la complejidad de la lucha contra el Covid y su respectiva evaluación es lo ocurrido en el Condado Hidalgo de Texas, un área donde habitan alrededor de un millón 200 mil personas ubicadas, entre otras ciudades, en McAllen, Edinburg y Mission.
Su Departamento de Salud hace un reporte diario de los casos positivos, así como de los decesos ocurridos como consecuencia de la enfermedad, y de prácticamente haberse abatido la mortalidad en el mes de diciembre del pasado año, súbitamente se empezó a registrar un notable incremento de casos positivos así como de muertes atribuidas a las reuniones propias de la época.
Sin embargo el impacto no se detuvo ahí. Este primero de febrero las autoridades sanitarias del Condado revelaron que no estaban reportados 23,000 casos positivos que se dieron durante el mes de enero, lo que le da un giro de más intensidad a lo que ocurre en el área si se considera que son un promedio de 750 casos que no se encontraban debidamente registrados.
Si bien es de impresionar el incremento, es meritorio que el Departamento haga la aclaración y explique que la falla estadística se debe a la súbita expansión de casos en la población del Valle de Texas que, por lo mismo, habrían retrasado la entrega de informes de las entidades encargadas de hacer las pruebas.
El incremento se ha dado, asimismo, en el estado de Tamaulipas, donde las cifras se han elevado también, de acuerdo con los datos que proporciona a diario la Secretaría de salud del estado.
En contraste, el Gobierno de Estados Unidos situó el lunes a México y a otros países y territorios en la categoría 4 de transmisión del coronavirus, definida como de riesgo “muy alto”, ante lo que aconsejó a sus ciudadanos no viajar a esos países.
En el caso de México, el país norteamericano llevaba seis meses en la categoría de nivel 3 de riesgo “alto”, pero el avance del virus durante las últimas semanas lo han llevado a subir de categoría.
El nivel 4 supone un aviso de “no viajar” al país en cuestión y, si resulta imperativo llevar a cabo ese viaje se recomienda estar completamente vacunado.
MARCO ANTONIO CORTINA S. Y LA UAT
El lunes trascendió, mucho más allá del ámbito universitario, el inesperado deceso del director de la Facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Tamaulipas en Tampico, Dr. Marco Antonio Cortina Saint André, a quien las autoridades universitarias, encabezadas por su rector, CP Guillermo Mendoza Cavazos, rindieron un póstumo merecido homenaje de cuerpo presente en el recinto universitario al que sirvió gran parte de su vida.
El Dr. Cortina Saint André tuvo una destacada trayectoria que se remonta a los tiempos de alumno de excelencia, simultáneamente con un destacado desempeño como líder estudiantil, siendo uno de los protagonistas de la lucha por lograr la autonomía de la UAT en 1967 para, posteriormente, alternar la actividad académica en la Institución de la que egresó, con actividades judiciales, forjando un impecable prestigio profesional.
Fue maestro de muchas generaciones en el nivel medio superior y universitario. Muchos de sus alumnos, entre los que se cuenta quien esto escribe, guardamos un enorme respeto por su dedicación e integridad, así como su permanente deseo de servir y formar nuevas generaciones con alto sentido profesional. Descanse en paz.