Dra. Aliza Lifshitz
• El ejercicio y el corazón
De acuerdo al estudio más extenso acerca de los beneficios del ejercicio realizado en 130,000 personas en 17 países, publicado en línea en Lancet, el corazón no sabe, ni le importa qué actividad hace que palpite más rápidamente. Lo que enseña el estudio es que cualquier actividad física que hace que aumente la frecuencia de los latidos del corazón es saludable, y entre más vigorosa, mayor es la protección que proporciona. Las personas que participaron en el estudio tenían entre 35 y 70 años y el estudio duró 7 años. Así que no hay duda alguna, el ejercicio es bueno para la salud del corazón.
• La contaminación ambiental y los riñones
La contaminación ambiental no sólo afecta nuestros pulmones, también afecta a nuestros riñones. De acuerdo a un estudio publicado en el Journal of the American Society of Nephrology encontró que el aumento en las partículas finas conocidas como PM 2.5, uno de los contaminantes en el aire, empeoraba el funcionamiento renal. Es más, los investigadores calcularon que los niveles de contaminación del aire aumentaban los casos de enfermedad renal crónica a 44,793 en este país y los casos de enfermedad renal terminal que requieren diálisis a 2,438. De allí la importancia de tratar de mejorar las condiciones ambientales ya que aún las que se consideran “seguras” pueden aumentar el riesgo.
• Para enfriar el cerebro, ¡bostece!
Todos bostezamos pero no se conoce exactamente el porqué. Muchos estiman que el bostezo aumenta el oxígeno en el cuerpo, pero hasta el momento no se ha probado. Un estudio reciente realizado en Austria sugiere que al bostezar, ya sea espontáneamente o por contagio al ver bostezar a otros, ayudamos a enfriar el cerebro cuando se sobrecalienta. El enfriamiento del cerebro mejora su rendimiento, por lo que los autores del estudio sugieren además, que el contagio del bostezo podría tratarse de un rasgo evolutivo que buscaría mejorar los estados de alerta general de un grupo de personas. ¿Interesante, verdad? Si quiere más detalles sobre este estudio, los encontrará en la edición en línea de la revista Physiology & Behavior. Para videos, reportes gratuitos y más información sobre temas de salud, visite www.VidaySalud.com y suscríbase.