Washington, (EFE).- La tasa interanual de inflación en Estados Unidos subió en diciembre hasta el 7 %, dos décimas por encima de la de noviembre y la cifra más alta registrada desde 1982, informó este miércoles la Oficina de Estadísticas Laborales del país.
Se trata de la mayor subida interanual desde junio de 1982 -con Ronald Reagan al frente del Gobierno estadounidense y Paul Volcker dirigiendo la Reserva Federal, ambos ya fallecidos- y está en línea con las predicciones de la mayoría de analistas, que ya preveían un aumento de los precios cercano al 7 %.
En cuanto a la subida mes a mes, los precios de consumo aumentaron en diciembre cinco décimas con respecto a los de noviembre, según esta estadística.
INFLACIÓN SUBYACENTE DEL 5,5 %
Si se excluyen los precios de alimentos y combustibles, que son los más volátiles, la inflación subyacente en diciembre fue del 0,6 %, con una tasa anual del 5,5 %.
Los precios de la energía bajaron en diciembre por primera vez desde hace varios meses, un 0,4 %, mientras que los de los alimentos subieron un 0,5 %, según el informe del Gobierno.
En concreto, el precio de la gasolina se redujo un 0,5 % en diciembre con respecto al mes anterior, aunque en el acumulado del año se ha disparado casi un 50 %.
Los principales motores detrás de la fuerte subida de precios en diciembre fueron la vivienda y los vehículos de segunda mano.
LOS VEHÍCULOS DE SEGUNDA MANO, DISPARADOS
En el caso de los vehículos, los automóviles y camiones usados se vendieron de media en diciembre pasado un 37,3 % más caros que en diciembre de 2020, mientras que para los vehículos de nueva fabricación esa subida fue únicamente del 11,8 %.
El dato de este miércoles añade presión a la Reserva Federal (Fed, la responsable de dictar la política monetaria de EE.UU.), que tiene un doble mandato de fomento del pleno empleo y estabilidad de precios.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, se postula para un segundo mandato al frente del organismo y en su comparecencia ayer en el Senado recalcó que la prioridad del organismo en este momento es la lucha contra la elevada inflación, aunque ello suponga poner menos énfasis en el objetivo de pleno empleo.
Powell, que en 2018 accedió al cargo a propuesta del expresidente republicano Donald Trump, ha sido nominado por el actual mandatario de EE.UU., el demócrata Joe Biden, para un segundo mandato de cuatro años al frente del banco central estadounidense y previsiblemente contará con el apoyo de suficientes senadores para garantizarse el puesto.
LA FED PRIORIZARÁ LA INFLACIÓN
El aspirante a la reelección defendió el martes ante el comité del Senado que valora su nominación que la Fed priorice en estos momentos la lucha contra la inflación a la consecución del pleno empleo, los dos objetivos asignados al banco central.
“No hay ninguna base legal para preferir el pleno empleo a la estabilidad de precios o viceversa. Son iguales. Sin embargo, en distintos momentos uno de ellos puede desviarse más del objetivo y ese es en el que debemos centrarnos un poco más”, explicó Powell en su intervención.
“A veces es el pleno empleo y a veces es la inflación. Yo creo que ahora es la inflación”, añadió el presidente de la Fed.
Preguntado sobre la posibilidad, apuntada por varios gobernadores del banco central, de que a lo largo de 2022 se produzcan entre tres y cuatro subidas de los tipos de interés, Powell se limitó a contestar que el organismo usará todas las herramientas a su disposición.