Ciudad de México, (EFE).- Una nueva caravana, la primera de 2022, integrada por unos 500 migrantes, partió este jueves desde la ciudad mexicana de Tapachula, estado de Chiapas, frontera con Guatemala, con rumbo a Estados Unidos.
La caravana salió la noche de este jueves desde las oficinas de regularización migratoria del Instituto Nacional de Migración (INM), donde no obtuvieron una respuesta a sus trámites para recibir los documentos que les permitieran el libre tránsito por el país y así salir de Tapachula.
Este grupo de migrantes está integrado en su mayoría por centroamericanos pero también hay personas de Venezuela, Colombia, Haití y de países africanos que tomaron la decisión de caminar a partir de esta noche con destino a Estados Unidos.
El medio millar de personas lo componen niños, niñas, mujeres y hombres y su primer objetivo es obtener una visa o un documento de manera temporal para viajar en transporte público de manera legal por México para llegara la frontera con EE.UU.
Los migrantes iniciaron su camino sobre el libramiento sur de Tapachula, vía que conduce a la Ciudad de México y señalaron que van hacia el norte en busca de un mejor futuro y señalaron que las autoridades migratorias no atendieron sus peticiones.
Algunos migrantes dijeron a Efe que los habían mandado a la oficina de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), para iniciar su trámite, pero ellos saben que la cita es paso podrían tardar hasta tres meses.
En su partida, los migrantes pidieron ayuda de los organizaciones de Derechos Humanos y de migrantes ya que caminan sin acompañamiento y sin agua ni alimentos.
La mayoría de este grupo de personas marcharon este jueves por la ciudad mexicana de Tapachula, para pedirle al Gobierno mexicano libre tránsito y documentos que regularicen su situación.
Esta es la primera caravana del 2022 que sale de Tapachula, una ciudad que lleva meses siendo reflejo de la crisis migratoria que vive la región.
A lo largo de 2021 partieron desde Tapachula varias caravanas migrantes con miles de migrantes, aunque la gran mayoría fueron frenadas y desmanteladas por las fuerzas de seguridad mexicanas.
La región vive un flujo récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) detectó a más de 1,7 millones de indocumentados en la frontera con México en el año fiscal 2021, que terminó el 30 de septiembre.
México ha interceptado a más de 252.000 migrantes indocumentados de enero a noviembre y deportó a más de 100.000 en el mismo periodo, de acuerdo con la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación del país.
Además, la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) recibió un récord de 131.448 solicitudes de refugio en 2021. De estos, más de 51.000 son haitianos.