Washington, (EFE).- La mayoría de los maestros de Estados Unidos creen que el porte de armas de fuego por parte del personal docente haría menos seguras las escuelas, aunque uno de cada cinco considera que llevar armas contribuiría a la seguridad en los planteles, de acuerdo con una encuesta publicada por la Corporación RAND.
La encuesta, que se llevó a cabo en octubre y noviembre de 2022, recopiló las opiniones de 2.500 maestros y maestras entre el nivel preescolar y el duodécimo grado acerca de la seguridad en las escuelas, blanco repetido de ataques armados en años recientes.
Mientras que el 54 % de los encuestados por RAND creen que la presencia de maestros armados haría menos seguras las escuelas, el 20 % opinan que contribuirían a la seguridad escolar y el 26 % que no harían a las escuelas ni más ni menos seguras.
El 15 % de los maestros hispanos encuestados opinan que los docentes armados harían más seguras las escuelas, en comparación con el 21 % de los maestros blancos y el 9 % de los educadores afroamericanos.
El 24 % de los docentes en escuelas donde la mayoría de los alumnos son blancos opinan que el porte de armas entre el personal haría más seguros los planteles, frente al 16 % de los maestros y maestras en escuelas donde hay mayoría de alumnos de minorías.
Los datos indican que unos 550.000 de los tres millones de maestras y maestros de preescolar a duodécimo grado elegirían llevar un arma de fuego a la escuela si ello estuviera permitido.
La encuesta también encontró que los maestros están más preocupados por el hostigamiento de los alumnos por parte de abusadores y violentos que por las armas de fuego.
“Aun con la desafortunada regularidad de la violencia con armas de fuego en las escuelas de Estados Unidos, que a menudo domina el debate sobre la seguridad en las escuelas, solo un 5 % de los encuestados mencionaron esa violencia como su mayor preocupación de seguridad”, explicó Heather Schwartz, autora del informe e investigadora en RAND.
“Pese a la prevalencia de los programas para contrarrestar los abusos y la prepotencia, la violencia cotidiana en las escuelas es lo que más preocupa a los maestros. Ese abuso, y no los tiroteos, es la mayor preocupación, seguido por las peleas y las drogas”, añadió.
La encuesta fue difundida pocos días después de cumplirse el primer aniversario del ataque perpetrado en la Escuela Primaria Robb de Uvalde (Texas), donde un individuo de 18 años de edad, armado con un rifle semiautomático, mató a 19 niños y dos maestras e hirió otras 18 personas el 24 de mayo de 2022.
En Texas, al amparo de una ley promulgada en 2013, los maestros y maestras que deseen hacerlo pueden portar un arma de fuego corta en los centros de educación.
Escuelas como la de la localidad Utopia, 50 kilómetros al noreste de Uvalde, tienen en sus puertas avisos que advierten sobre la presencia de personal armado en el edificio.
En 2022 hubo aproximadamente 300 tiroteos en jardines de infantes y escuelas primarias y secundarias en todo Estados Unidos, que causaron muertes o heridas a más de 300 personas, y el informe señaló que más de 300.000 alumnos han estado expuestos a la violencia con armas en las escuelas en las últimas dos décadas.
