Miami (EE.UU.), (EFE).- Los Miami Heat se impusieron a los Brooklyn Nets por 122-115 para sumar su séptima victoria consecutiva, lo que les confirma como el equipo más en forma de la NBA en estos momentos.
Miami (8-4) venció además por primera vez en más de año y medio a los Nets (6-6), que se había convertido en la ‘criptonita’ de estos Heat, a quienes había ganado de manera consecutiva en los últimos seis encuentros (cinco oficiales y otro en esta misma pretemporada).
La última victoria de los Heat ante Brooklyn fue en marzo de 2022.
Jimmy Butler alcanzó su tope anotador de esta temporada con 36 puntos.
Duncan Robinson, que recordó a sus mejores noches, fue el otro azote desde el perímetro convirtiendo 6 triples de 10 intentos y se marchó hasta los 26 tantos.
De nada sirvieron los 23 puntos de Mikal Bridges y Lonnie Walker IV ante la seriedad de Miami en casa.
El mexicano-estadounidense Jaime Jáquez Jr. aportó 10 puntos, 4 rebotes y 5 asistencias en los locales.
Miami al alza
Comenzó muy sólido en defensa Brooklyn, concediendo en los primeros minutos tan sólo un triple de Robinson y una genialidad de Butler que le llevó a la línea de tiros libres.
Del lado visitante, Bridges asumió mucho juego ofensivo y llegó a 11 puntos con tan solo nueve minutos en pista durante el primer cuarto.
Dos triples consecutivos de Kyle Lowry y un recién integrado en pista como Josh Richardson, más una bandeja de Butler, completaron un parcial de 8-3 que puso de nuevo las tablas en el luminoso (20-20) a tres minutos para la finalización del primer cuarto.
Elevó mucho la intensidad defensiva Miami en el último tramo y le sirvió para cerrar el primer parcial arriba (30-27) con su primera ventaja de la noche.
Hubo un festival de triples para inaugurar el segundo cuarto, con los Nets especialmente encendidos. Walker hizo dos y Royce O’Neale y Cameron Johnson también fusilaron por separado. Caleb Martin se sumó al acierto por los locales en su regreso tras diez partidos por lesión.
Se disparó la anotación, pero ninguno de los dos equipos pudo romper en el luminoso por más de cinco puntos. A cuatro minutos para el descanso Johnson sumó su cuarta falta tras una ofensiva sobre Kevin Love. Se sentó en el banquillo cuando llevaba tan solo 3 puntos pero dejó de sumar en defensa.
Hasta entonces había sabido sacar más crédito a sus ataques Brooklyn, pese a que Miami transmitía muy buenas sensaciones colectivamente. Un triple de Butler, otro de Robinson y dos contraataques posteriores culminados por Highsmith les llevaron de nuevo a mandar en el marcador.
Miami selló así el 60-52 con el que ambos equipos se marcharon a los vestuarios. Era la máxima diferencia del partido hasta entonces.
Los Heat defendieron su renta con uñas y dientes, conocedores de la remontada que sufrieron precisamente ante los Nets hace apenas quince días. Pero la concentración e intensidad que faltaron entonces rebosaron este jueves.
Cuando Brooklyn trató de acercarse, Robinson castigó con un triple a 7:30 para el final del tercer cuarto con el que devolvió el +8 en el marcador (69-61).
Y en los últimos minutos, fue Butler con dos canastones quien castigó la moral de los Nets. La primera, un mate tras dejar sentado a O’Neale; la segunda un dos más uno, que acompañó posteriormente con una asistencia a Jáquez Jr.
Con Butler al frente se cosechó un nuevo parcial de 7-0 y el margen continuó aumentando (86-73). A falta de doce minutos, el marcador reflejó un 95-83 para los de casa.
El último periodo mantuvo la misma dinámica, ya que unos Heat muy responsabilizados y en mejor dinámica nunca se dejaron remontar. Lejos de conformarse, trataron de ampliar la distancia y alcanzaron hasta 17 puntos de margen en el luminoso antes del final.
Aunque los de Jacque Vaughn lucharon hasta el último suspiro y llegaron a estar a nueve puntos, Miami abrió el campo en los últimos minutos y supo circular el balón para terminar siempre con un tiro cómodo, canastas que cayeron como jarros de agua fría en la intención de remontada de los Nets.
Nacho García