Redacción Deportes (EE.UU.), (EFE).- Los Golden State Warriors salvaron su segundo partido como locales (126-125), en un duelo de infarto ante unos Kings que tuvieron el último tiro para ganar, e igualaron la serie 2-2 antes de regresar a Sacramento.
Harrison Barnes tuvo en sus manos el triple decisivo para los Kings sobre la bocina pero no acertó. En los Warriors, el juego exterior fue clave con Stephen Curry (32 puntos), Klay Thompson (26) y Jordan Poole (22).
Por los Kings destacó otra vez De’Aaron Fox (38 puntos), quien estuvo acompañado por el novato Keegan Murray (23 tantos).
El partido supuso el regreso de Draymond Green tras su sanción, pero el interior de Golden State comenzó desde el banquillo.
FOX PIDE PASO
Fue un encuentro de ritmo trepidante y hasta 19 alternancias en el marcador.
Domantas Sabonis fue protagonista de inicio anotando, asistiendo y asociándose tan bien como siempre con un Fox que cerró este primer parcial con 10 puntos y 2 de 4 en triples.
La defensa fue muy intensa en ambos lados de la cancha, incluso agresiva por momentos sobre Sabonis.
Las tres pérdidas de balón de los Warriors en cinco minutos y los 7 puntos de un Fox determinante en el inicio provocaron el primer tiempo muerto de Steve Kerr y la entrada de Green al juego.
Tardó muy poco en tener su primera discusión con Fox y afectó a la concentración del cuadro visitante generando un parcial de 10-3. Fueron 8 puntos en sendos minutos para Curry antes de su primer descanso.
Alex Len sumó minutos de calidad en lugar de Sabonis: el pívot aportó 4 puntos y 2 rebotes sin arrugarse ante las provocaciones de Green. Fox, desde el triple, hizo el resto y puso arriba a Sacramento al final del primer cuarto (31-32).
Los Warriors dormitaron también en el arranque del segundo periodo y el parcial de los Kings siguió aumentando hasta un contundente 5-20 desde el final del primer cuarto. Así obligaron de nuevo a Kerr a detener el juego con 36-45 en el luminoso.
Golden State funcionó a impulsos, conectando y desconectando del choque según marcaba su juego exterior con Curry, Thompson y Poole. Entre los tres aportaron 19 de los 34 puntos del segundo cuarto.
Fue insuficiente para combatir el estado de gracia de Fox, que llegó al descanso con 21 puntos y que estuvo bien secundado por los 15 de Murray (65-69).
EMOCIÓN HASTA EL FINAL
El partido se igualó incluso más en la reanudación y las rentas nunca fueron mayores de dos puntos en casi todo el tercer cuarto. Las defensas se impusieron a los ataques, pero a falta de cuatro minutos Andrew Wiggins y Curry encontraron la manera recuperar una ventaja de seis tantos (89-83) con un parcial de 7-0.
A Sacramento le costó digerirlo y lo reflejó tomando malas decisiones en ataque, perdiendo balones, reduciendo su incidencia en el rebote ofensivo y disminuyendo su efectividad en el exterior.
Con el ambiente en contra y la intensidad de los locales, Sacramento se bloqueó y tocó fondo en la última acción del tercer cuarto. Los Warriors circularon el balón de manera excepcional culminando en las manos de Thompson en la esquina, que anotó sobre la bocina y puso diez tantos de ventaja (102-92).
Pese a la falta de experiencia en postemporada, los Kings demostraron una capacidad competitiva enorme y supieron regresar al partido con otro parcial de 0-7 arrancando el periodo definitivo. Nunca le perdieron la cara al choque y mantuvieron sus opciones de triunfo hasta el final.
El último tramo tuvo a Curry y Fox como hombres destacados en un duelo espectacular con 10 y 12 puntos, respectivamente. Los Warriors entraron con +5 al último minuto pero los de Mike Brown aún tenían mucho que decir.
Fox anotó un triple para poner el 126-125 a 29 segundos para el final después de que Curry, en un error garrafal, pidiera un tiempo muerto cuando no ya no le quedaban a su equipo (técnica y posesión en contra).
Curry falló un tiro después y, con 10 segundos en el reloj, la pelota era de los Kings para buscar la victoria.
Con una sólida defensa local, se la terminó jugando de tres Barnes en un buen lanzamiento que sacó el aro y que le otorgó el triunfo a los Warriors.