Esfuerzos tecnológicos se concentran en combatir problemas de salud graves en el mundo para reducir los niveles de mortalidad de enfermedades como el cáncer
NotiPress.- Max Saráchaga, director Médico de Amgen México, en entrevista para la Asociación Mexicana de Industrias de Investigación Farmacéutica (AMIIF), explicó el uso de la biotecnología dentro de la industria farmacéutica. Esta se usa para fabricar medicamentos por medio de bacterias o células vivas y esto se logra modificando el código genético de la célula, comentó. Además, según la entrevista consultada por NotiPress, añadió que dicho proceso es usado para fabricar proteínas específicas como la insulina.
También aseguró que el avance de la biofarmacéutica no se detendrá, pues permite desarrollar medicamentos con mayor eficacia que antes. Esto al comparar el primer paso fundamental de esta ciencia como lo fue la descripción de la doble hélice del ADN, en 1953 por James Watson y Francis Crick. Posteriormente, a principios de los 70, los científicos aprendieron a manipular el ADN, es decir, a cortarlo y pegarlo. Y finalmente, a mediados de la misma década, comenzó la fabricación de anticuerpos monoclonales.
Otra precisión hecha por Saráchaga, es la del primer medicamento biotecnológico: la insulina humana, desarrollada en 1982. Y explica, sucedió con la ventaja de fabricarla en la cantidad y disponibilidad requerida por los pacientes. En el mismo sentido, señaló el desarrollo de tecnología para secuenciar el genoma humano, lo que permitió a los científicos entender con mayor precisión el origen de varias enfermedades y hallar mejores tratamientos.
No obstante, dejando de lado los avances en este campo médico, también hay que analizar los retos a superar en esta disciplina, como el acceso y el marco regulatorio, pues dicha situación desemboca en una poca disponibilidad para los pacientes que requieren medicinas de este tipo. En sentido contrario, señaló ventajas para discernir entre una proteína, un anticuerpo monoclonal o un pepticuerpo, según las características del padecimiento en cada individuo, para brindarle tratamiento personalizado.
Por último, es importante entender que los esfuerzos se concentrarán en combatir problemas de salud graves a nivel mundial, como el cáncer, enfermedades cardiovasculares, salud ósea y procesos inflamatorios. En cuanto a eso, el cáncer es la enfermedad número uno en niños con la variedad de la leucemia linfoblástica, misma que hace 40 años era mortal en el 100% de los casos. Y según Saráchaga, ya es curable en el 85% de los niños con medicamentos biotecnológicos e inclusive se ha logrado la remisión de la enfermedad.