Nueva York, (EFE).- El agua en lata o en tetra brik, que aparentemente puede pasar por una cerveza o un cartón de leche, cada vez son más populares en las tiendas, calles o festivales de Estados Unidos, hasta tal punto que la startup de agua enlatada Liquid Death, que apareció en 2019, está ahora valorada en 700 millones de dólares.
No es barata: una lata de 500 ml cuesta entre 1,69 o 2,29 dólares en tienda, pero este precio puede subir hasta los 5 comprándola en un puesto callejero.
La compañía con sede en Santa Mónica, cuyo lema es “Muerte al plástico”, recaudó esta semana 70 millones de dólares en fondos liderados por Science Ventures, elevando su valoración a casi el millón de dólares.
Según informó la prensa económica, utilizará esta inversión para expandirse a nuevas categorías de bebidas y al mercado europeo.
“Creemos que Liquid Death puede ser la bebida sin alcohol de más rápido crecimiento de todos los tiempos”, dijo en un comunicado Peter Pham, cofundador de Science Ventures.
En comparación, Pham recalcó que la bebida energética Monster tardó cuatro años y Celsius, otra bebida energética, doce años para alcanzar el nivel de éxito minorista que Liquid Death ha tenido en solo tres años.
La compañía está lista para generar 130 millones de dólares en ingresos este año, lo que sería una gran subida si se tiene en cuenta que la cifra fue de 45 millones de dólares de 2021.
UN MARKETING VANGUARDISTA
Liquid Death fue cofundada por Mike Cessario, exdirector creativo de Netflix, y juega con el hecho de que su envase y su nombre (“muerte líquida”) se puede confundir con una bebida alcohólica y en sus spots muestran a gente bebiendo el agua haciendo un agujero en la base de la lata, técnica para beber cerveza conocida popularmente como “shotgun”.
Una de sus imágenes publicitarias muestra la lata empaquetada dentro de una especie de ataúd de lujo, con la lata envuelta en cuero rojo.
Estas latas de agua, que también vende muñecos coleccionables de su logotipo, velas, ropa y gorras, ofrece su agua en conciertos y en cadenas como Target o Whole Foods, así como la web de Amazon.
En 2020, la compañía lanzó un álbum “Greatest Hates” (Los mejores mensajes de odio), utilizando comentarios negativos en las redes sociales para las letras. El disco incluía canciones como “Fire your marketing guy” (Despide al tipo que se encarga del marketing).
Otras vanguardistas campañas de marketing de Liquid Death -que tiene 1,3 millones de seguidores en Instagram- ha sido incluir extraer sangre del surfista Tony Hawk en un el diseño de patinetas, que ya están agotadas.
Liquid Death afirma en su sitio web que su agua con y sin gas, es “infinitamente reciclable”, proviene de los Alpes austriacos y que dona una parte de cada lata vendida para ayudar a eliminar la contaminación por plásticos.
El cofundador y director ejecutivo de la compañía, Mike Caesario, dijo en una entrevista con Bloomberg que parte del éxito de Liquid Death se puede atribuir a que sus latas hacen que el producto parezca “divertido y poco saludable como la cerveza o una bebida energética”.
OTROS SUSTITUTOS DE LAS BOTELLA TRADICIONALES
Uno de los competidores de Liquid Death, es Path Water, que ofrece agua en botella de aluminio y acaba de recaudar 30 millones de dólares en financiamiento.
Esta compañía se describe como “la primera agua embotellada 100 % recargable y reciclable en una botella de aluminio”, es decir, ofrecen un producto no descartable, a diferencia de las latas.
Por su parte, Boxed Water usa un envase de cartón, que es 92 % de origen vegetal y 100 % reciclables.
Esta agua en cartón dice ser “una alternativa sostenible a las botellas de plástico y las latas de aluminio”, en una pequeña puya a sus competidores de Liquid Death.