Tijuana (México), (EFE).- Cientos de migrantes fueron desalojados este domingo de manera pacífica de un campamento cercano a una garita internacional en la ciudad mexicana de Tijuana, frontera con Estados Unidos, y reubicados en albergues.
Los migrantes, centroamericanos, mexicanos y haitianos, entre otros, ocupaban el sitio próximo a la Garita Internacional El Chaparral, desde febrero de 2021.
Al comienzo llegó a haber más de 2.000 migrantes que tenían como principal exigencia una pronta atención para la solicitud de refugio en Estados Unidos, con el fin de huir de la violencia de sus lugares de origen.
Con el paso de los meses, el número de residentes en el campamento fue disminuyendo y actualmente había 381 personas durmiendo en carpas, que fueron retiradas por personal de limpieza del municipio de Tijuana en la primeras horas de este domingo.
Al campamento, ubicado en una zona federal, llegaron primero agentes de la Guardia Nacional y agentes antimotines de la Policía Municipal de Tijuana, todos desarmados y con la intención de controlar el orden en el lugar.
Posteriormente se personaron la alcaldesa de Tijuana, Monserrat Caballero y el secretario del gobierno del estado de Baja Califormia, Catalino Zavala, para supervisar el desalojo.
Sin uso de la violencia y bajo estricto orden, los migrantes comenzaron a reunir sus artículos personales y subieron a camiones que se acondicionaron para el traslado a albergues habilitados para ellos.
Uno de estos albergues es el Centro Estatal de Atención al Migrante, mientras que otros optaron por irse a otro sitio que ya tenían previsto.
“Esta es una zona de mucho tráfico vehicular y lo hicimos temprano para que ellos lleguen en el día, porque hacerlo de noche era definitivamente muy peligroso”, justificó la alcaldesa Caballero al ser cuestionada por medios sobre el operativo en la madrugada.
Por su parte, Zavala explicó que hubo coordinación entre los gobiernos municipal, estatal y federal “para llevar a cabo este operativo de forma segura”, y ambos funcionarios compartieron que a quien lo desee, se le pagarán gastos de traslado para retornar a su lugar de origen.
“En lo que tiene que ver con el traslado y reubicación a los albergues van a contar con el apoyo y la asesoría legal para su trámite que tiene que ver con el asilo político”, dijo Zavala y añadió que organizaciones y abogados podrán entrar a los albergues.
Según organizaciones, en el campamento actualmente había 381 personas, de las cuales 59 eran familias compuestas por mamá, papá e hijos, 27 eran madres solteras, 33 hombres solos, cuatro mujeres solas, ocho bebés, dos mujeres embarazadas, dos adultos mayores y dos integrantes de la comunidad LGBTI.
Actualmente, la región vive un flujo récord hacia Estados Unidos, cuya Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) detectó a más de 1,7 millones de indocumentados en la frontera con México en el año fiscal 2021, que terminó el 30 de septiembre.
México deportó a más de 114.000 extranjeros en 2021, de acuerdo con datos de la Unidad de Política Migratoria de la Secretaría de Gobernación del país.
Mientras que la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) recibió un récord de 131.448 solicitudes de refugio en 2021. De estos, más de 51.000 son haitianos.