México, (Notimex).- A través de un examen de sangre, sin necesidad de múltiples pruebas invasivas, las personas con episodios de dolor y distensión abdominal crónicos pueden conocer si su problema se debe al Síndrome del Intestino Irritable (SII). Los síntomas consisten en dolor abdominal y cambios en las condiciones intestinales, tales como diarrea, estreñimiento o ambas.
Se trata de un mal que afecta la motilidad y sensibilidad del sistema digestivo, así como la calidad de vida de quienes lo sufren, porque requieren de servicios públicos de salud con frecuencia y pierden más horas de trabajo.
Sin embargo, actualmente se cuenta con una innovadora prueba que ahorra tiempo en el diagnóstico y dinero a los pacientes, desarrollada por investigadores del Hospital Cedar’s Sinai, en Los Ángeles.
El estudio de laboratorio IBSchek utiliza biomarcadores inmunológicos que facilitan un diagnóstico directo; es una vía alterna para un largo proceso de descarte que conlleva exploraciones invasivas, como la colonoscopia.
El gastroenterólogo Miguel Ángel Valdovinos, profesor de la Universidad Nacional de la Autónoma de México (UNAM), destacó que la ventaja principal de IBScheck es que detecta el síndrome de forma directa a través de un examen de sangre, con un diagnóstico casi inmediato.
“Esta prueba indica específicamente un diagnóstico de SII-D (con predominio diarrea) y SII-M (diarrea alterna a constipación), en lugar de llegar a éste a través del descarte de otras enfermedades”, precisó.
Entre otras ventajas, al disminuir el número de procedimientos para obtener el diagnóstico, las personas se ahorran tiempo y dinero, añadió.
El tratamiento para el Síndrome del Intestino Irritable incluye antiespasmódicos, antibióticos luminales (que actúan sobre el tracto intestinal sin ser absorbidos), y otros medicamentos que regulan el movimiento en el colon.
Otra vía es el cambio en la dieta; sin embargo, cada enfermo necesita atención personalizada, por lo que un médico debe supervisar cada paso del tratamiento.