Los Ángeles (EE.UU.), (EFE).- Entradas a 30.200 dólares. 225 millones de visualizaciones en las redes. Tres millones de espectadores por televisión en directo en EE.UU. Con esta enorme expectación se vivió el hito de LeBron James, que el martes pasado superó a Kareem Abdul-Jabbar y se convirtió en el máximo anotador de la historia de la NBA.
Los fans de baloncesto de todo el mundo tenían en mente una cifra el 7 de febrero: los 36 puntos que necesitaba LeBron para batir la legendaria marca de Abdul-Jabbar de 38.387 puntos en total.
Pero otros números -y el negocio- alrededor de ese partido ya inolvidable entre Los Angeles Lakers y los Oklahoma City Thunder explican también la magnitud de este histórico acontecimiento para la NBA.
Por ejemplo, la liga detalló este miércoles que este fue el encuentro de temporada regular más visto en la cadena de cable TNT en casi cinco años sin contar los partidos inaugurales de cada temporada.
Tres millones de personas de media vieron en EE.UU. en directo el récord de LeBron y el pico llegó a las 20.45 horas de Los Ángeles, cuando la estrella de los Lakers culminó su hazaña, con 3,7 millones de aficionados pegados a la televisión.
Esta cifra, no obstante, deja fuera a los que optaron por ver el partido en Spectrum SportsNet, que tiene los derechos para emitir los encuentros de los Lakers en California.
Este canal, que cuenta como comentaristas con exjugadores de los Lakers como James Worthy o Derek Fisher, sigue el día a día y todos los encuentros de los de púrpura y oro y su matriz acordó en 2011 pagar 3.000 millones de dólares para gestionar los derechos regionales de los Lakers durante 20 años.
Más impactante -y más acorde al siglo XXI- es el dato del impacto del récord en las redes sociales con 225 millones de visualizaciones de vídeo en los perfiles de la NBA.La liga detalló que esta cifra de ‘engagement’ en las redes es la más alta jamás registrada para un partido de la fase regular.
Los que no se conformaron con seguir el partido por las pantallas tuvieron que vaciar la cartera para poder ir al Crypto.com Arena de Los Ángeles. Así, cinco días antes del partido, una entrada a pie de pista para el Lakers-Thunder costaba unos 30.200 dólares, según los datos del portal de referencia en reventa StubHub.
No obstante, los que jugaron con fuego esperando hasta el último minuto no se quemaron ya que, dos horas antes de comenzar el partido, se podía comprar en ese mismo portal un boleto para las filas más elevadas y alejadas del estadio por unos 290 dólares (cinco días antes las entradas más asequibles del estadio costaban 386).
Existía la duda de si LeBron conseguiría el récord contra los Thunder el martes o frente a los Milwaukee Bucks este jueves.
Una vez alcanzado el récor, la expectación acerca del partido entre los Lakers y el equipo de Giannis Antetokounmpo, uno de los mejores equipos de la NBA, cayó en picado y en la noche del miércoles se podían comprar entradas para este encuentro por ‘sólo’ 98 dólares.
ESTRELLA DENTRO Y FUERA DE LA PISTA
Igual que su récord se pudo medir perfectamente por todo lo que sucedió contra los Thunder fuera de la pista, también el legado de LeBron se puede calibrar por su huella lejos de las canchas.
“LeBron es un hombre increíble dentro y fuera de la pista. Es un empresario increíble, hace un trabajo caritativo espectacular en Ohio y en todo el país”, afirmó el martes una leyenda de los Lakers como Earvin “Magic” Johnson.
Con muchos y variados intereses en los negocios, LeBron ocupó el año pasado la posición número dos de la lista de Forbes de deportistas con más ingresos en todo el mundo con 121 millones de dólares.
¿Quién estuvo por delante de “King James”? Leo Messi con 130 millones.Dos tercios de los ingresos de LeBron fueron por patrocinadores como Nike o Crypto.com o por sus aventuras fuera del baloncesto como su entrada en Hollywood, donde, por ejemplo, protagonizó y produjo la película “Space Jam: A New Legacy” (2021).
No obstante, en la NBA se respeta -y se paga- su legado, tanto que esta temporada es el tercer jugador mejor remunerado de la liga con 44 millones de dólares (solo tiene por delante a Stephen Curry con 48 y a su ya excompañero Russell Westbrook con 47).
LeBron ha dicho en numerosas ocasiones que su sueño es compartir pista en la NBA con su hijo Bronny James, de 18 años, y el pasado verano extendió su contrato con los Lakers por dos años y 97,1 millones de dólares.
En cualquier caso, la ambición de LeBron no terminará el día que decida retirarse del baloncesto y ha asegurado en numerosas ocasiones que tiene una meta para esa nueva etapa de su vida: ser el dueño de una franquicia de la NBA en Las Vegas.
David Villafranca