Washington, (EFE).- El ministro de Economía y candidato presidencial argentino, Sergio Massa, afirmó este martes en Washington que la dolarización de Argentina que propone su oponente ultraliberal Javier Milei genera preocupación en Estados Unidos.
En una rueda de prensa, dijo que a Washington no le sorprende “la aparición de estos fenómenos de antipolítica” en la región porque ya ha habido otros, pero “sí les preocupa la idea de que alguien prometa que va a construir la economía usando la moneda de ellos”.
“Les suena raro que alguien se comprometa a darle a los argentinos la moneda que no es de los argentinos, sino que es la de Estados Unidos”, afirmó.
Por ello, el ministro y candidato peronista sugirió que Milei debe haber tenido “algún correlato de charla con la Reserva Federal de Estados Unidos o del Congreso” para hacer una propuesta como esa.
“Supongo que algún permiso o alguna charla habrán tenido quienes hoy le ofrecen a los argentinos dolarización para poder usar los dólares en Argentina”, dijo Massa en una rueda de prensa.
Massa hizo estas declaraciones tras firmar en Washington con el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) un financiamiento adicional para Argentina por unos 1.300 millones de dólares en programas para la seguridad alimentaria y para las pequeñas y medianas empresas (pymes).
El ministro y candidato llegó este martes a la capital estadounidense para diversas reuniones, incluido un encuentro este miércoles con la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva.
Esa reunión tendrá lugar el mismo día en el que el directorio del organismo tiene previsto aprobar la última revisión del acuerdo de refinanciación de deuda, que supondrá desembolsos para Argentina en dos tramos por 10.000 millones de dólares, unos 7.500 millones de dólares este mes y el resto en noviembre.
El desembolso, estipulado para refinanciar la deuda del país con el organismo por unos 45.000 millones de dólares -contraída durante el Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019)-, fue aplazado por el propio FMI a la espera de evaluar los resultados de las elecciones primarias de Argentina.
En los comicios, celebrados el 13 de agosto, la sorpresiva victoria del ultraliberal Javier Milei, con un 30,04 % de apoyos, pateó el tablero político y el propio FMI contactó con él y con la aspirante opositora, la centroderechista Patricia Bullrich, tercera líder más votada, por detrás de Massa, para intercambiar posturas económicas en caso de un eventual gobierno.