Ciudad de México, (EFE).- México no avanzó en el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) de 2021 que divulgó este martes la organización Transparencia Internacional, que lo mantuvo en el sitio 124 de 180 países evaluados.
México mantuvo una calificación de 31 puntos de 100, al igual que el año anterior, según el índice, considerado el principal indicador mundial de medición de la corrupción en el sector público.
El país latinoamericano, que en 2019 estuvo en la posición 130, ahora comparte la misma calificación que Gabón, Níger y Papúa Nueva Guinea.
“México sigue siendo el país peor evaluado en términos de corrupción de los 38 países que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE). En el G20, México ocupa la posición 18, por encima de Rusia”, expuso Transparencia Internacional en su informe.
En América Latina, México se ubica por debajo de Uruguay (73), Chile (67) y Costa Rica (58), los únicos países de la región que aprueban.
Pero México también está peor evaluado que Cuba (46), Colombia (39), Argentina y Brasil (38), Ecuador, Panamá y Perú (36), y El Salvador (34).
Transparencia Internacional resaltó que el combate a la corrupción fue un factor que “definió la elección” de 2018, cuando ganó el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador con la promesa de “desterrar la corrupción”.
“Sin embargo, los casos definidos como emblemáticos —Estafa maestra, Odebrecht, Agronitrogenados, expresidentes, entre otros—, no han sido aún sancionados en materia penal. Tampoco hay una recuperación de los activos desviados”, advirtió la organización, con sede en Berlín, Alemania.
La organización también señaló “una creciente preocupación por el uso político-electoral en las fiscalías mexicanas, que pese a gozar en muchos casos de autonomía formal, no son vistas como órganos independientes al gobierno”.
“Su actuación presenta sesgos favorables o negativos dependiendo del grupo político al que se investiga”, consideró.
El IPC clasifica 180 países y territorios según el nivel de percepción de la corrupción en el sector público de cada uno, medidos a través de datos de 13 fuentes externas, en una escala de 0 (los más corruptos) a 100 (los más limpios).
A la cabeza se sitúan Dinamarca, Finlandia y Nueva Zelanda, que obtienen 88 puntos, mientras que Somalia (13), Siria (13) y Sudán (11) consiguen una vez más las puntuaciones más bajas.