Tijuana, (Notimex).- El profesor emérito y fundador de El Colegio de la Frontera Norte (Colef), Jorge Bustamante dio a conocer que 40 por ciento de las personas que viajan por el Golfo de México, tienen menos recursos económicos, menos educación y por ende, son más propensas crímenes y abuso de derechos.
Durante una reunión que organizó el Colef con representantes de albergues para migrantes en Baja California, dialogaron acerca de las condiciones de los albergues y se sumaron a la idea de colaborar para mejorar, tanto en los aspectos materiales, como en los humanos.
El evento fue coordinado Araceli Almaraz, coordinadora del Archivo Oral de Migración e investigadora de El Colef y participó Jorge Bustamante, los directores de las asociaciones de migrantes y los académicos.
“No hay un diagnóstico preciso sobre las condiciones que presentan los albergues al día de hoy; tampoco se sabe cómo viven en cuanto a gastos de operación. Cada albergue presenta condiciones muy diferentes, no tanto de los migrantes que las frecuentan, sino de las operaciones que realizan día a día”, dijo Almaraz Alvarado al dar inicio a la primera reunión de albergues en la ciudad de Tijuana.
Jorge Bustamante, acerca de los derechos humanos y la migración, aclaró que su enfoque es teórico: “Yo sé de los conceptos, números, estadísticas, pero yo quiero aprender de la realidad”.
Cuando estuvo como presidente de El Colef, el catedrático indicó que le interesó mucho que la institución desarrollara un área de investigación sobre migración y desde entonces, se ha trabajado sobre ese tema, misma que no solamente ha llevado a El Colef a investigar a lo largo de toda la frontera norte, sino también Centroamérica y diferentes partes del mundo.
Bustamante hizo énfasis en el término racismo a la mexicana, el cual, explicó, viene desde el racismo que recibían los indígenas hace algunos años y que forma parte de la tradición mexicana que impera de manera negativa dentro de nuestra sociedad.
“Es una enfermedad que padecemos los mexicanos y que, al igual que en Estados Unidos y otras partes del mundo, afecta los valores, relaciones sociales, relaciones con el gobierno, etcétera; es algo que deberíamos de eliminar todos los seres humanos, sin embargo, en ocasiones se acepta y hasta se protege”, afirmó el académico.
“No hay lugar donde no exista la violación a los derechos humanos”, apunto.
