Singapur fue creada por la tenacidad y el esfuerzo, no por la suerte.
Lee Kuan
INTRODUCCIÓN
Singapur es una de las naciones más prósperas y desarrolladas del mundo. En pocos años, pasó de ser un pequeño puerto sin recursos naturales a convertirse en una potencia económica global, con uno de los PIB per cápita más altos del planeta. Este ascenso meteórico ha generado admiración y curiosidad. ¿Qué hace a Singapur tan exitoso? ¿Cuáles son las claves de su alto rendimiento económico y social? Y, lo más importante, ¿qué pueden aprender países como México de su modelo?
FACTORES CLAVES DEL ÉXITO DE SINGAPUR
1. GOBIERNO EFICIENTE Y CERO TOLERANCIA A LA CORRUPCIÓN: Uno de los pilares del éxito de Singapur es su gobierno altamente eficiente, liderado por una meritocracia. Los funcionarios públicos son seleccionados y promovidos por su competencia y habilidad, lo que ha generado un sistema burocrático ágil y funcional. Además, Singapur tiene una estricta política de cero tolerancias a la corrupción, un problema que afecta gravemente a muchos países en desarrollo, incluyendo México. La limpieza de su aparato estatal ha permitido que las decisiones políticas y económicas se centren en el bienestar a largo plazo, sin el lastre de intereses corruptos.
2. EDUCACIÓN DE CLASE MUNDIAL: El sistema educativo de Singapur es reconocido como uno de los mejores del mundo. Los estudiantes singapurenses consistentemente alcanzan los primeros lugares en pruebas internacionales de matemáticas, ciencias y lectura, como el PISA. Este éxito no es casual. Singapur invierte fuertemente en la formación de maestros de alta calidad, con currículos rigurosos y metodologías pedagógicas innovadoras que fomentan el pensamiento crítico y la resolución de problemas. Este enfoque en la educación ha creado una fuerza laboral calificada y adaptable, clave en una economía basada en el conocimiento.
3. INFRAESTRUCTURA MODERNA Y LOGÍSTICA AVANZADA: Singapur ha aprovechado su ubicación estratégica como un nodo central para el comercio internacional. Con uno de los puertos más activos del mundo y un aeropuerto que es considerado de los mejores globalmente, el país ha desarrollado una infraestructura logística de clase mundial. Además, sus políticas de inversión en infraestructura han asegurado que el país cuente con tecnología avanzada y conexiones eficientes, convirtiéndolo en un centro neurálgico para el comercio y las finanzas internacionales.
4. DIVERSIFICACIÓN ECONÓMICA Y ATRACCIÓN DE INVERSIONES: A pesar de su tamaño limitado, Singapur ha logrado diversificar su economía de manera notable. Ha establecido un entorno favorable para las empresas internacionales, con políticas fiscales competitivas, un entorno regulatorio estable y una apertura al comercio global. Además, el gobierno ha invertido en sectores estratégicos como las biotecnologías, las finanzas, el turismo y la manufactura avanzada, garantizando que la economía no dependa de un solo sector. Esta estrategia ha permitido que Singapur resista shocks económicos externos y mantenga un crecimiento sostenido.
5. URBANISMO Y VIVIENDA PLANIFICADA: Singapur es famoso por su urbanismo inteligente. A pesar de tener una alta densidad de población, el país ha logrado mantener altos estándares de vida gracias a su cuidadosa planificación urbana y a políticas de vivienda pública que han asegurado que más del 80% de su población tenga acceso a viviendas asequibles y de calidad. La combinación de espacios verdes, tecnología inteligente y transporte público eficiente ha hecho de Singapur un modelo de desarrollo sostenible.
LECCIONES PARA MÉXICO
Si bien el contexto histórico, geográfico y cultural de Singapur es diferente del de México, hay varias lecciones valiosas que este país asiático puede ofrecer a naciones en desarrollo y que los gobernantes de muchas naciones pueden seguir.
1. LUCHA EFECTIVA CONTRA LA CORRUPCIÓN: México enfrenta desafíos importantes en términos de corrupción. Al igual que Singapur, México podría beneficiarse de la implementación de políticas más estrictas de transparencia, con sistemas de rendición de cuentas y un poder judicial independiente.
No es un secreto para nadie que cada administración en México, así como muchos países de Latinoamérica y otras naciones, hacen una bandera importante en sus campañas de luchar contra la corrupción. Una vez en el poder, la promesa parece haberse olvidado o hacen enunciados que no se respaldan en la práctica. Singapur ha demostrado que la corrupción no es un mal inevitable, sino un obstáculo que se puede vencer con liderazgo y determinación.
2. INVERSIÓN ESTRATÉGICA EN EDUCACIÓN: México tiene una enorme juventud con un potencial increíble, pero enfrenta desafíos en su sistema educativo. Aprender del modelo de Singapur significaría invertir en la formación de maestros, modernizar los currículos y, sobre todo, garantizar que la educación se enfoque en habilidades para el futuro, como la tecnología, la ciencia y la innovación. Un sistema educativo fuerte con inversiones que lo muestren puede impulsar la competitividad del país y generar una mano de obra más preparada y flexible.
3. DIVERSIFICACIÓN DEL COMERCIO Y ATRACCIÓN DE INVERSIONES: México ya es una de las economías más abiertas de América Latina, con tratados como el T-MEC. Sin embargo, aún depende en gran medida del sector energético y de la manufactura vinculada a los EE.UU. Singapur ofrece una lección clara sobre la importancia de diversificar y desarrollar sectores de alta tecnología e innovación, así como atraer inversión extranjera directa en áreas estratégicas, inclusive reduciendo la dependencia de los Estados Unidos.
4. PLANIFICACIÓN URBANA Y VIVIENDA ASEQUIBLE: México, especialmente en sus grandes ciudades, enfrenta problemas de planificación urbana, con desarrollos desordenados y una oferta limitada de vivienda accesible. Siguiendo el ejemplo de Singapur, México podría adoptar modelos de urbanización sostenible, con un enfoque en la creación de vivienda pública de calidad, el mejoramiento del transporte público y la integración de espacios verdes.
5. MERITOCRACIA EN EL GOBIERNO Y LA ADMINISTRACIÓN PÚBLICA: En Singapur, los mejores y más brillantes son seleccionados para ocupar puestos clave en el gobierno y la administración pública. Esta meritocracia ha creado una burocracia altamente eficiente. En México, una reforma para garantizar que el sector público opere bajo principios meritocráticos y no políticos o clientelares podría mejorar significativamente la calidad de la gestión pública. Es triste que las reformas que el actual gobierno en México, sobre todo la Judicial, no toma en cuenta la experiencia de Singapur y por el contrario abre la puerta a la plutocracia y no a los méritos.
CONCLUSIÓN
El éxito de Singapur no es el resultado de un solo factor, sino de la combinación de políticas públicas inteligentes, un liderazgo comprometido con el desarrollo a largo plazo y una cultura de disciplina y trabajo duro. Singapur no ha sido el único, naciones como Corea del Sur, Finlandia, Suiza, Alemania, Japón y Hong Kong han tenido resultados parecidos, por lo que no es un misterio y es un camino probado. Muchos países, pero principalmente México que tiene una afortunada y privilegiada ubicación frente a la nación más desarrollada y que se beneficia del “nearshoring” ha probado precisamente lo opuesto en la controvertida gestión gubernamental a punto de terminar. México y sus gobernantes pueden aprender mucho de esta inspiradora nación por su enfoque en la lucha contra la corrupción, la inversión en educación y la diversificación económica.
Sus ciudadanos, de la misma manera pueden orientar mejor sus preferencias electorales por programas que apunten a estas fórmulas. Si bien cada nación enfrenta desafíos únicos, las lecciones de Singapur ofrecen una guía sobre cómo transformar la adversidad en una oportunidad para el crecimiento y la prosperidad.