Cleveland (EE.UU.), (EFE News).- El presidente, Donald Trump, acusó este martes de “socialista” a su rival en las elecciones de noviembre, el candidato demócrata Joe Biden, quien le respondió calificándole de “mentiroso” que se comporta de manera “poco presidencial”.
Trump lanzó esa acusación al inicio del primer debate presidencial entre ambos, tras afirmar que su contrincante planeaba eliminar los seguros privados de salud en el país porque “su partido quiere irse por la vía socialista”.
“El problema que usted tiene es que quiere extinguir los seguros privados”, afirmó el mandatario estadounidense al comenzar el debate en Cleveland (Ohio), y tachó de “socialista” a Biden y a su partido.
Biden respondió tajante: “Yo soy el Partido Demócrata, los principios del partido (en estas elecciones) son los que yo aprobé”.
Los primeros minutos del debate transcurrieron de manera agria, con múltiples interrupciones de Trump tanto a Biden como al moderador, el periodista Chris Wallace.
“El hecho es que todo lo que ha dicho hasta ahora es simplemente una mentira. No estoy aquí para retar sus mentiras. Todo el mundo lo sabe, es un mentiroso”, subrayó Biden.
“¿Puede callarse, hombre? Esto es tan poco presidencial”, espetó el exvicepresidente en otro momento a Trump, para después decirle: “Sigue cotorreando”.
Aunque el presidente interrumpía más a menudo a Biden, fue el candidato demócrata quien más ataques dirigió a su rival al comienzo del debate, cuando declaró directamente que Trump “no sabe de lo que habla”.
El primer bloque del debate se centró en el futuro del Tribunal Supremo, aunque la discusión se desvió rápidamente al tema de los seguros de salud, porque la oposición demócrata teme que la nominación de Trump de una nueva jueza para esa corte derive en la derogación de la reforma sanitaria de 2010.
Esta es la primera ocasión en la que Trump y Biden se ven las caras desde que comenzó la campaña, lo que, sumado a la escasez de actos electorales presenciales debido a la pandemia, ha disparado la expectación para el debate.
Trump y Biden debaten desde sendos podios situados a una distancia superior a la habitual debido a la COVID-19, no se han dado la mano -como es costumbre en este tipo de debates-, y compiten ante un público limitado, de unas 80 o 90 personas, todas ellas sometidas previamente a tests de coronavirus.