Granada, (EFE).- El Granada compró al delantero albanés Myrto Uzuni hace seis meses por 3 millones de euros al Ferencvaros húngaro. Ahora su cláusula es de 25 millones. Huyó de la pobreza de Albania a Grecia siendo niño. Fregó platos, compartió estudios y fútbol. Esta es la increíble historia de Uzuni, el gran admirador de Cristiano Ronaldo.
El ascenso del Granada a LaLiga Santander, conseguido de forma brillante el pasado fin de semana como campeón de LaLiga SmartBank, ha servido para disparar el valor de muchos jugadores de la plantilla rojiblanca, el que más el de Myrto Uzuni.
El hecho de convertirse en el máximo goleador de Segunda División, con 23 dianas, y en el jugador más determinante de la categoría, abriendo el marcador con goles decisivos en infinidad de partidos de los andaluces esta campaña, ha multiplicado la valía de un futbolista que se encuentra en el mejor momento de su carrera deportiva.
Uzuni, que este miércoles cumplió 28 años, cuenta además con una historia personal detrás y con un carisma que lo convierten en un futbolista único que se ha convertido en el auténtico ídolo de la afición rojiblanca.
En pleno desarrollo del granadinismo, con una ciudad cada vez más volcada con el principal club de la ciudad y una rejuvenecida masa social, nadie ha vendido esta temporada más camisetas que Uzuni, que ha convertido el ‘11’ en el número preferido de los aficionados.
Sus 23 goles con el Granada y su papel cada vez más importante en la selección albanesa han convertido a Uzuni en un preciado objeto de deseo este verano por parte de clubes de media Europa, aunque el ascenso del equipo a Primera División ha hecho que su cláusula de rescisión se doble hasta los 25 millones de euros.
Uzuni llegó al Granada a cambio de tres millones de euros procedente del Ferencvaros húngaro en el mercado invernal de la pasada campaña 2021/22 y se comprometió hasta 2025, aunque su buen hacer hizo que el conjunto rojiblanco le ampliara la vinculación sólo unos meses después hasta 2026, modificando las condiciones de una hipotética salida.
Los 12’5 millones que hasta ahora costaba Uzuni al club que lo quisiera han pasado a 25 tras el ascenso del Granada a Primera, aunque el principal aval que garantiza la continuidad del futbolista es su identificación con el equipo andaluz y el hecho de que el pasado verano ya rechazara ofertas para marcharse.
Uzuni llegó a la entidad con el Granada en Primera y tras el descenso, sólo unos meses después, descartó salir pese a haber equipos interesados y manifestó su agradecimiento al club por la confianza y su deseo de contribuir a devolverlo a la máxima categoría, como ahora ha hecho.
La intrahistoria de Uzuni comenzó cuando tenía diez años y la pobreza le obligó a abandonar Albania con su familia camino de Grecia, donde alternó trabajo, pese a ser un niño, estudios y fútbol.
Continúa siete años después con la vuelta a Albania para que, entre otras cosas, el joven Myrto pueda federarse y seguir jugando al fútbol, algo que en Grecia no era posible por la ausencia de documentos de residente y que en su país natal también está cerca de no conseguir por su extrema falta de recursos.
Poco a poco evolucionó hasta pasar por diferentes equipos albaneses y romper como profesional en el Lokomotiv de Zagreb, lo que le abrió las puertas del histórico Ferencvaros, donde no tardó en convertirse en el ídolo de la hinchada húngara y tuvo la oportunidad de disputar la Liga de Campeones.
Cuando tuvo la oportunidad de medirse a Cristiano Ronaldo, su espejo de toda la vida y el jugador al que admira y al que siempre ha deseado parecerse, prometió que celebraría un gol como él.
Marcó con el Ferencvaros en el campo del Juventus y cumplió su promesa ante un Cristiano con el que cambió la camiseta tras el partido. Fue el día más feliz de la carrera deportiva de Uzuni.
La siguiente jornada inolvidable, aparte de cada partido que tiene la oportunidad de jugar con la selección albanesa, como él mismo recuerda siempre que puede, fue el ascenso celebrado con el Granada el pasado sábado en el Nuevo Los Cármenes.
No sólo por lo deportivo, sino también porque el carismático Uzuni pidió matrimonio a su novia, la también albanesa Uarda Hyseni, en el mismo césped del Nuevo Los Cármenes en plena celebración.
Myrto, el chico que con diez años estuvo tres días andando con su familia para alcanzar Grecia huyendo de la pobreza y que no iba al colegio porque ayudaba a su madre a fregar platos, es ahora una de las sensaciones futbolística en España y una joya codiciada por distintos equipos de Europa.
Uzuni, el amante de los helicópteros que celebra muchos de sus goles con un saludo militar, es ahora la pieza más codiciada de un Granada que lo ha tasado en 25 millones de euros, aunque él siempre ha mostrado su amor a este club y a esta afición que lo idolatra, y quiere seguir haciendo carrera en España.
Javier Aguilera