Monterrey (México) (EFE).- A tres años de su muerte, la norteña ciudad de Monterrey recordó al ídolo de la cumbia colombiana Celso Piña, fallecido el 21 de agosto de 2019 a causa de un inesperado infarto.
El evento se celebró en el Parque Los Pinos, en las faldas del Cerro La Campana, barrio que vio al llamado “Rebelde del Acordeón” crecer y convertirse en una estrella de la música.
A pesar de su éxito, Piña nunca olvidó sus raíces, por eso aún ahora es tan querido por su pueblo al norte de México.
Al ritmo de la música de la Ronda Bogotá, admiradores, familiares y amigos de la infancia se reunieron en el lugar para rendirle tributo durante su tercer aniversario luctuoso.
En el lugar no hubo caras tristes, sino todo lo contrario, el evento se convirtió en una fiesta de baile y color. La gente se animó a “sacar polvo” a la improvisada pista con cada uno de los temas.
Las sombrillas y gorras que portaban los presentes ayudaron a amortiguar los incandescentes rayos del sol; sin embargo, una vez que se armó la fiesta poco importó a los bailadores el extenuante calor.
En la parte musical también participaron: Vallenato Regio, Kombolocos, Dany y Los Príncipes del Vallenato, Édgar Marrugo y Siriguayos, entre otros.
La familia de Celso, encabezada por su hermano Rubén Piña, su viuda Juanita Ortiz y sus hijos, estuvieron presentes para recibir de manos del alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio Riojas un reconocimiento y una donación para la Asociación formada en honor del extinto músico.
“Primero que nada muchas gracias por estar aquí”, aseguró Verónica Piña, hija del intérprete de “Cumbia Sobre el Río”.
Agradeció el apoyo a su padre y la participación de la gente en la primera conmemoración del aniversario luctuoso de Celso, ya que los dos anteriores no se celebraron por motivo de la pandemia de la covid-19.
“Lo estamos celebrando con mucha emoción porque a él no le hubiera gustado que hubiera gente llorando; que hubiera gente cantando es lo que él quería”, comentó.
Por su parte, Rubén Piña, hermano del ídolo, también mostró su agradecimiento y cariño a los admiradores del cantante.
Vairon Solano, en representación de la Asociación Civil Celso Piña, expresó su agradecimiento al alcalde de Monterrey, Luis Donaldo Colosio por su apoyo para el proyecto que representa.
“Les recuerdo que el día de hoy, estamos también recibiendo el apoyo para construir una escuela de música para toda la comunidad de la Campana”, mencionó Solano.
Por su parte, el presidente municipal, Luis Donaldo Colosio, entregó una donación de 400 mil pesos para la construcción de la escuela de música, que promueve la Asociación Celso Piña.
“Desde aquí de la Campana para todo el mundo seguiremos apoyando a través de un donativo la formación de talentos de niñas de niños”, comentó.
El músico Celso Piña nació el 6 de abril de 1953, en Monterrey, capital del norteño estado de Nuevo León, y fue pionero, así como uno de los principales exponentes de la cumbia colombiana y el vallenato.
Su fama comenzó primero en “tocadas” en los alrededores de la Campana, el barrio en donde vivió la mayor parte de su vida, posteriormente, su fama llegó al resto de México y sur de Estados Unidos.
Su internacionalización vino cuando fusionó los ritmos colombianos con sonidos tropicales y géneros como el sonidero, el ska, reggae y la música norteña.
Fue el artista consentido del escritor colombiano Gabriel García Márquez. Ambos se conocieron en el 2003 en el Museo de Arte Contemporáneo (Marco) y el autor de “Cien Años de Soledad” no tuvo reparo en bailar al son de la música de “El Rebelde del Acordeón”.