Miami, (EFE).- El cantautor colombiano Camilo dio en Miami el primero de los conciertos de una gira por Estados Unidos que le llevará hasta su gran noche en los Latin Grammy, en los que es el artista más nominado, con 10 candidaturas.
“Soñé siempre con este momento, desde que era chiquito soñaba con hacer un concierto en Estados Unidos y que sea en Miami es una prueba de que los sueños se hacen realidad”, dijo el cantautor al darle la bienvenida a su público, que cariñosamente llama “la tribu”.
En la primera de sus tres noches totalmente vendidas en el icónico teatro Fillmore de Miami Beach, Camilo se mostró por momentos eufórico, por otros conmovido y siempre emocionado.
Y es que como subrayó el artista colombiano el concierto de Miami fue el primero en este país y en la ciudad donde vive desde hace más de cinco años, y a donde llegó “con una guitarra y un cuaderno con el sueño que ustedes escucharan mis canciones”.
La noche comenzó con “Favorito” y “Tutu”, y no faltó prácticamente ninguno de los temas de sus dos discos, “Camilo” y “En mis manos”, este último el que le da nombre a un tour que ya llevó por Europa.
Camilo, vestido con un enterizo color khaki, conversó con el público desde un escenario minimalista, tenía apenas sus músicos de siempre y compartió el escenario varías veces con su esposa, Evaluna Montaner.
En ocasiones el artista compartió el micrófono con el público, que incluía a gente de todas las edades, incluyendo una veintena de niños que levantaron la mano para decir que el suyo era el primer concierto al que asistían.
Camilo tocó el cuatro venezolano con el que ha escrito muchas de sus canciones, la guitarra acústica y eléctrica, el sintetizador y los bongós.
Cantó bachata con “Bebé”, reguetón con “Tattoo”, corridos con “Tuyo y mío” y salsa dura en “Gucci, Prada” y calypso en “Kesi”.
El momento más eufórico de la noche fue cuando él y Evaluna interpretaron “Índigo”, la primera canción de su próximo disco y el tema con el que anunciaron que serán padres por primera vez.
“Esta es la primera vez que La Pulga puede enseñar su panza en el escenario y la primera vez que Índigo (el nombre que han dicho darán a su hijo independientemente de su sexo) canta con nosotros”, señaló Camilo.
La noche terminó con un “Gracias” gigante y “Vida de rico”, el tema nominado al Latin Grammy como mejor canción del año.
Después de cerrar sus tres conciertos en Miami, Camilo tocará en Atlanta el domingo y seguirá por Chicago, Filadelfia, Houston y El Paso, entre otras ciudades.
Hará una parada la semana de los Latin Grammy, que se celebrarán el 18 de noviembre en Las Vegas, a donde Camilo llegará con 10 nominaciones fruto de su disco “En mis manos” y la canción “Amén”, junto con su suegro, Ricardo Montaner.
La gira “En mis manos” seguirá después en California, con conciertos en San Diego, Los Ángeles y San José.