Programas federales de educación temprana Head Start han sido instruidos por el gobierno federal a eliminar casi 200 palabras y frases de sus solicitudes de financiamiento, bajo advertencia de que podrían ser rechazadas, según documentos judiciales recientes, y que fueron hechos públicos en varios medios de comunicación estadounidenses. Entre los términos señalados figuran “accesible”, “discapacidad”, “minoría”, “racial”, “tribal” y “mujeres”. La directriz salió a la luz como parte de una demanda presentada por programas en varios estados contra el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS).
La demanda sostiene que la prohibición de iniciativas de diversidad, equidad e inclusión (DEI) impulsada por la administración Trump entra en conflicto con la ley federal de Head Start, que exige servicios cultural y lingüísticamente apropiados, así como apoyo a niños con discapacidades. Documentos del caso indican que al menos un programa recibió correos del HHS solicitando retirar palabras específicas y luego una lista más amplia de términos a evitar, lo que, según su directora, contradice obligaciones legales vigentes.
Defensores de derechos de personas con discapacidades y representantes de programas indígenas han expresado preocupación, señalando que algunas de las palabras restringidas están contempladas en leyes federales que regulan el acceso a servicios para niños con discapacidades y comunidades tribales. HHS declinó comentar sobre el caso por tratarse de un litigio en curso. A nivel nacional, Head Start atiende a cerca de 750,000 niños con educación temprana, alimentación, evaluaciones de salud y apoyo a las familias.
La lista completa de palabras vetadas presentadas en la demanda, las puede encontrar a continuación: