Para La Red Hispana
No es casualidad que la salud aparezca entre las principales preocupaciones de los votantes hispanos a unos días de las elecciones del 5 de noviembre.
La inequidad en el sistema de salud de Estados Unidos es un problema persistente que afecta de manera desproporcionada a nuestra comunidad.
A pesar de que somos la minoría más grande del país, enfrentamos barreras estructurales para acceder a la atención médica, como la insuficiencia de cobertura de salud y la baja disponibilidad de servicios en español en nuestras comunidades.
Estas desigualdades no sólo impactan la calidad de vida de millones de personas, sino que también agravan las disparidades en resultados de salud, lo que hace que muchos hispanos no reciban la atención necesaria para prevenir y tratar enfermedades.
Aunque la Ley de Salud Asequible (ACA) de Barack Obama ayudó a reducir la tasa de personas no aseguradas, la comunidad latina sigue siendo uno de los grupos con más probabilidades de no tener cobertura médica.
Esto se debe en parte a que muchos latinos trabajan en sectores donde los empleadores no ofrecen seguros de salud, así como a la dificultad para acceder a programas de ayuda pública debido a restricciones de elegibilidad, especialmente para aquellos que no tienen un estatus migratorio regularizado.
El acceso limitado a servicios de salud en español también contribuye a la inequidad. La barrera del idioma puede ser un gran obstáculo para muchos latinos que no hablan inglés con fluidez, lo que dificulta la comunicación con médicos y el entendimiento de diagnósticos, tratamientos y medicamentos.
Además, la falta de proveedores de atención médica culturalmente competentes puede resultar en un trato desigual, afectando negativamente la calidad de la atención recibida.
Peor aún: la pandemia de COVID-19 dejó al descubierto y agravó muchas de estas desigualdades. Nuestra comunidad fue una de las más afectadas debido a factores como el alto porcentaje de hispanos en trabajos esenciales, la falta de seguro médico, y la dificultad para acceder a pruebas y tratamientos.
La crisis sanitaria confirmó que son necesarias reformas profundas en el sistema de salud para garantizar un acceso justo y equitativo para todos, sin importar el origen étnico o situación económica. Abordar estas disparidades es crucial para crear un sistema de salud más justo y para mejorar la calidad de vida de la comunidad latina en Estados Unidos.
Vota por tu salud, porque votar es una forma de influir en políticas sanitarias que impactan directamente a nuestras familias, comunidades y a nosotros mismos.
También es una oportunidad de apoyar candidatos que promuevan un sistema de salud accesible y equitativo para todos, desde los jóvenes que necesitan cobertura preventiva hasta las personas mayores que dependen de Medicare para mantener su bienestar.
Te invitamos a conocer las propuestas de los candidatos sobre salud en laredhispana.org/votemos para que deposites un voto bien informado, por correo, o en persona el martes 5 de noviembre.