Cancún, (Notimex).- A excepción del agua potable, que implica un adecuado lavado de manos, así como el uso de antibióticos, ningún otro factor o medida han repercutido tanto en evitar la morbi-mortalidad en los niños como son las vacunas, aseveró la coordinadora de Investigación del Hospital General de México, Carmen Espinoza.
Subrayó la importancia de las inmunizaciones en el mundo, pues han repercutido en la supervivencia de las personas y han contribuido a desaparecer enfermedades.
En el marco del XVII Congreso Latinoamericano de Infectología Pediátrica, que reunió en este destino a expertos de 23 países, la especialista recordó que en México se trabaja de manera continua para garantizar el abasto y eficacia de las vacunas, sobre todo de enfermedades contagiosas.
Refirió que en México hay cero casos de enfermedad invasiva por influenza, que es uno de los padecimientos que más atienden las autoridades, en tanto que la polio está erradicada, y la rubeola, las paperas y el sarampión van a la baja.
“La mejor demostración de que las vacunas sirven es cuando se presentan cero casos de las enfermedades que se combaten”. Carmen Espinoza indicó que en los últimos años ha disminuido el número de muertes por influenza gracias a las vacunas.
“La vacunación es la estrategia más efectiva y eficiente para tener bajo control las enfermedades que pueden causar la muerte es una de las medidas de salud más importantes a nivel mundial y su contribución ha sido fundamental para reducir la incidencia y la morbilidad por estas enfermedades que son contagiosas”, sostuvo.
La especialista infectóloga precisó que cada año se previenen millones de muertes gracias a las vacunas y se salvan miles de niños de alguna discapacidad, por lo que puntualizó en la importancia de las inoculaciones para disminuir la morbi-mortalidad de los niños.
