Los Ángeles (EE.UU.), (EFE).- “Fantastic Beasts: The Secrets of Dumbledore” llega este fin de semana a los cines estadounidenses para medir el impacto de una nueva entrega de la saga que se ha visto rodeada de polémica tras apartar a Johnny Depp de su reparto.
Warner Bros. decidió no renovar a Depp en su papel de Gellert Grindelwald en medio de la batalla legal que mantiene abierta con su expareja, Amber Heard, después de que esta lo acusara de maltrato físico y psicológico.
Así, la tercera versión de la precuela del universo Harry Potter tiene ahora al actor Mads Mikkelsen haciendo de Depp y mantiene a otras figuras como Jude Law (Albus Dumbledore) y Eddie Redmayne (Newt Scamander).
En esta ocasión, la película comienza con la misión del ‘magizoólogo’ Newt Scamander de mantener con vida a una criatura celestial que tendrá un papel fundamental en un ritual para determinar quién liderará el mundo mágico de manera justa y sabia.
Otras tramas basadas en el amor o la cuestión del bien contra el mal terminarán de constituir esta cinta, que completa su reparto con Ezra Miller (Creedence Barebone), Dan Fogler (Jacob Kowalski), Katherine Waterstone (Tina Goldstein), Poppy Corby-Tuech (Vinda Rosier) y Richard Coyle (Aberforth).
Los espectadores podrán valorar finalmente el nuevo giro de esta franquicia cuyo tráiler generó críticas negativas en la red entre los seguidores más acérrimos de Depp y entre quienes consideraron “transfóbicos” algunos comentarios de la autora de la saga literaria, J.K. Rowling.
Además, “Fantastic Beasts: The Secrets of Dumbledore” debutará en la cartelera estadounidense junto a “Father Stu”, un drama dirigido por Rosalind Ross y encabezado por Mel Gibson y Mark Wahlberg, que narra la historia de un boxeador retirado que inesperadamente encuentra la fe y decide hacerse sacerdote.
La otra opción más destacada para este fin de semana es “Navalny”, un documental homónimo sobre el opositor ruso que utiliza los recursos propios del ‘thriller’ para describir desde adentro la mano de hierro con la que el presidente ruso, Vladímir Putin, acalla a voces disidentes en Rusia.