Ciudad de México, (EFE).- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, presumió este martes de un “balance positivo” en las finanzas públicas por los excedentes del precio del crudo mexicano, que está al doble de lo presupuestado por el Gobierno ante la crisis de Ucrania.
“No tenemos necesidad de aumentar los precios de las gasolinas porque se compensan los subsidios que estamos dando a la gasolina con los excedentes del precio del petróleo crudo. Entonces estamos haciendo un balance y es positivo para la Hacienda Pública”, declaró en su conferencia diaria.
El mandatario destacó que la mezcla mexicana de crudo ronda los 115 dólares por barril, el nivel más alto desde el sexenio de Felipe Calderón (2006-2012).
El precio contrasta con lo proyectado en el presupuesto oficial de Hacienda de 2022, que contempla un precio de 55,1 dólares por barril e ingresos petroleros por más de 1,087 billones de pesos (casi 51.000 millones de dólares).
Pero ante el alza de costos, el Gobierno de México también decretó el domingo un estímulo fiscal del 100 % del impuesto especial sobre producción y servicios (IEPS) que pagan los consumidores por la gasolina Magna y el diésel.
“La mayor parte (de los excedentes) va a compensar lo que podría significar los incrementos en los precios de los combustibles. Para decirlo con claridad, lo utilizaríamos para subsidiar los combustibles”, explicó este martes López Obrador.
El presidente insistió en que a México “no afecta” la crisis económica derivada de la invasión de Rusia en Ucrania.
“No vamos a tener problemas de aumentos de precios en combustibles ni en energía eléctrica a pesar de la invasión y de la guerra en Ucrania. Nosotros no vamos a aumentar los precios de las gasolinas, del diésel, ni el precio de la luz para que estemos tranquilos por eso”, sostuvo.
El mandatario aseguró que su Gobierno “logró detener la caída” que se produjo por 14 años consecutivos en la extracción de petróleo.
Además, afirmó que han reducido en un 45 % las compras de gasolinas del extranjero con la inversión hecha para rehabilitar las seis refinerías existentes, la compra de Deer Park en Houston, y la construcción de la nueva refinería Dos Bocas en el sureste mexicano.
“Tenemos suficientes reservas de petróleo, entonces se está exportando petróleo y estamos obteniendo excedentes y van a ser más esos excedentes de venta de petróleo crudo, alrededor de 900.000 barriles diarios”, detalló.
Pese a su visión, el presidente reconoció preocupación por la inflación, que supera una tasa general del 7 % anual, su nivel más alto en 20 años.
“Desde luego se están produciendo desequilibrios en el mercado de combustibles por algunas medidas que se están tomando”, lamentó.